De las sombras al rock: La historia de Charly Manson,hoy Sharlie Rockstar.
En el universo de la lucha libre mexicana, pocos personajes han recorrido un camino tan turbulento, oscuro y a la vez inspirador como Jesús Luna Pozos, mejor conocido como Charly Manson y, en su etapa más reciente, como Sharlie Rockstar.
Nacido el 18 de febrero de 1975 en Torreón, Coahuila, Jesús Luna encontró en el ring no solo una forma de vida, sino un escenario perfecto para canalizar sus demonios, reinventarse y dejar una marca indeleble en el pancracio nacional.
Facebook:Let's talk about lucha libre
El nacimiento del Manson mexicano
Su carrera comenzó a mediados de los años 90, cuando fue entrenado por figuras como El Picudo y El Dandy. Al poco tiempo, adoptó el personaje que lo lanzaría al estrellato: Charly Manson, una figura oscura, provocadora y rebelde, fuertemente inspirada en el músico Marilyn Manson. Su estética gótica, cabello largo y actitud retadora rápidamente lo convirtieron en uno de los luchadores más singulares de AAA.
Durante su primera etapa, formó parte de grupos legendarios como Los Vatos Locos y más adelante The Black Family, La Secta Cibernética y Los Hell Brothers, donde compartió el ring con nombres como Cibernético y Chessman. Con ellos protagonizó algunas de las rivalidades más intensas de la lucha libre en los 2000.
Entre lesiones y tragedia: los golpes fuera del ring
Pero no todo fue gloria. En 2001 y luego en 2008, Charly Manson sufrió fracturas graves en el fémur, lesiones que lo mantuvieron alejado de la lucha durante largos periodos. Pese al dolor y la rehabilitación, Manson siempre volvió, demostrando una fuerza de voluntad inquebrantable.
Sin embargo, el golpe más duro no llegó sobre el cuadrilátero. En 2011, fue arrestado por agredir a dos policías tras una discusión en la Ciudad de México. El incidente lo llevó a ser condenado a más de 7 años de prisión por intento de homicidio. Estuvo tras las rejas hasta 2015, cuando finalmente recuperó su libertad.
El renacer: Sharlie Rockstar
Al salir de prisión, Charly regresó al ring con una nueva actitud y un nuevo personaje: Sharlie Rockstar. Si bien mantuvo su esencia rebelde, esta nueva versión mostraba a un luchador más centrado, más alegre y agradecido con la vida. De rudo oscuro pasó a técnico con alma de estrella de rock, sin perder el estilo que lo hizo famoso.
Desde su regreso, ha trabajado en el circuito independiente, IWRG, AAA, y hasta volvió al CMLL como parte de Los Invasores, demostrando que la pasión por la lucha libre sigue más viva que nunca.
Una leyenda sin máscara
Jesús Luna Pozos nunca necesitó una máscara para volverse ídolo. Su rostro ha sido el lienzo de su historia: cicatrices, expresión intensa y la mirada de alguien que ha vivido de todo. Su legado se escribe no solo con victorias, sino con su capacidad de caer y levantarse una y otra vez.
Charly Manson —o mejor dicho, Sharlie Rockstar— sigue siendo una figura única, irreverente y resiliente. Un ejemplo de que, incluso desde lo más profundo, es posible volver a brillar con luz propia.